La diabetes mellitus es una de las endocrinopatías diagnosticadas con mayor frecuencia en perros y gatos. Cuando la enfermedad induce unos determinados niveles de glucosa en sangre aparecen los signos más comunes de poliuria, polidipsia, polifagia y pérdida de peso. Los mecanismos patogénicos que dan lugar a este trastorno no son exactamente los mismos que en personas, pero la clasificación de la diabetes en veterinaria ha seguido más o menos el esquema usado en medicina humana el cual a la vez ha servido de guía para identificar y distinguir las distintas formas de diabetes.
En un primer artículo, los autores realizan una revisión sobre las variantes de diabetes más frecuentes, diabetes tipo I y tipo II, así como otras formas más infrecuentes, de forma comparada entre perros, gatos y personas.
En un segundo artículo relacionado, se discuten los factores genéticos y ambientales que contribuyen a su desarrollo y como éstos varían en función de la especie y del tipo de diabetes.