f. – (Patol. General) Disminución adaptativa del tamaño celular por pérdida de substancia celular, que puede tener una base fisiológica o patológica. Las células atróficas disminuyen su función pero no mueren siempre y cuando el mecanismo que induce la atrofia no persista. Si las células acaban muriendo el tejido atrófico es substituido por tejido graso.
~ fisiológica. Se observa en la involución de estructuras embriónicas y fetales como la notocorda, conducto tirogloso, timo etc. También el útero tras el parto sufre un grado de atrofia. Es un fenómeno asociado igualmente a la senilidad.
~ patológica. Puede generarse por desuso, falta de inervación, isquemia, deficiencias nutricionales, reducción de estímulo hormonal o presión.
f. – (Citol.) Pérdida de la diferenciación estructural y de la funcionalidad de las células normales. La diferenciación es un término que se aplica para describir el parecido de las células neoplásicas a sus homólogas no neoplásicas. En general, los tumores benignos están bien diferenciados (p.e. las células neoplásicas de un leiomioma son semejantes a las células musculares normales de la musculatura lisa). Las neoplasias malignas, por el contrario, pueden ser diferenciadas o indiferenciadas. Anaplasia es un sinónimo de escasa diferenciación en un tumor y por tanto de malignidad.
Algunos de los rasgos citológicos que caracterizan a la anaplasia incluyen el pleomorfismo nuclear y citoplasmático (células y nucleos de distinto tamaño), un elevado radio núcleo:citoplasma, figuras mitóticas aberrantes, células multinucledas y pérdida de polaridad en la orientación de las células.