El raquitismo y la osteomalacia están repuntando en humanos como consecuencia de los hábitos culturales, alimentación, y alteraciones en el nivel de exposición a la radiación solar. El raquitismo está ampliamente descrito en animales, pero los artículos publicados no suelen acompañarse de descripciones histológicas, y, en ocasiones, los diagnósticos están basados en hallazgos clínicos y radiológicos poco convincentes. En animales, la mayoría de casos son producto de deficiencias en vitamina D o fósforo, con algunos casos hereditarios en perros, gatos, cerdos y ovejas. Se ha podido constatar diferencias interespecíficias en la sensibilidad a la deficiencia de vitamina D y fósforo. Al descubrirse que la vitamina D no sólo juega un papel en la homeostasis del calcio y del fósforo, sino que también influye en el sistema inmunológico y el desarollo del cáncer, ha aumentado el interés por el estudio de modelos animales de esta enfermedad metabólica. En esta revisión, aunque compleja, resulta muy interesante para obtener una visión actualizada sobre el metabolismo de la vitamina D y el raquitismo, a través de animales domésticos y animales de laboratorio.
Vitamin D Metabolism and Rickets in Domestic Animals: A Review